Serios daños y evacuados por las incesantes lluvias en el interior

"No hay un cese de la lluvia, por lo que estamos teniendo serios problemas en terrenos productivos y viviendas cercanas al río Santa María", declaró ayer Jorge Lagoria, secretario General del municipio de Santa María.
Ayer por la tarde, la comuna y personal de Hidráulica iniciaron los trabajos con maquinaria, buscando al menos una solución que "creemos no será de fondo, pero por lo menos intentaremos detener un poco el avance de las aguas del río Santa María", añadió Lagoria.
El agua alcanzó a gran parte de las viviendas construidas por una cooperativa hace poco tiempo. "El río avanzó mucho sobre el terreno. Antes del desborde los separaba una distancia aproximada de 140 metros, y hoy la misma no supera los 100 metros. Esa es la zona crítica", explicó el funcionario.

Autoevacuados
Son muchas las familias que ya hicieron abandono de sus viviendas porque no quieren arriesgarse a un desastre mayor. Otras tantas casas están siendo afectadas por el cauce del río, cuyas crecidas se vienen sucediendo desde hace un mes. Este cauce es muy difícil de dominar, y deriva en los inconvenientes propios que hoy padecen algunos santamariano.
Según Lagoria, ayer se ultimaban detalles de un informe solicitado a la secretaría de Obras Públicas para que el intendente de Santa María, Jorge Andersch, gestione ante la provincia algún tipo de ayuda.
Asimismo, también se evaluaba ayer declarar el estado de emergencia hídrica en el departamento: "La situación es grave. Hay muchas familias que necesitan colchones, frazadas, indumentaria", dijo Lagoria, quien además dijo no tener todavía datos precisos de la cantidad de personas perjudicadas.
Respecto del estado de las rutas, la provincial 46 que une Belén con Andalgalá, permanecía ayer intransitable por lluvia y crecida de ríos; la ruta 40 estaba cortada, en tanto que el tramo que comprende Hualfín, Villa Vil y San Fernando era directamente intransitable.